sábado, 13 de diciembre de 2008

Balance 2008.

¿Cómo empezar? ¿No? Fue un año digamos que complicado. Muchas cosas buenas que terminaron mal. Muchas cosas malas que terminaron peor. Nuevas experiencias. Nuevos amigos. Muchos cambios. Demasiado para mi monótona vida, podría decir. Pero me llevo muchos conocimientos, muchos lindos recuerdos, muchísimas cosas que me formaron aún más como persona. Me reencontré, me desligué y me aferré a tantas personas. Sería larguísima la lista de personas con las que me volví a cruzar. Y una de ellas es mi mejor amiga. Aquella que siempre estuvo, pero se fue un ratito, para volver mejor que nunca y no irse jamás. Después asumo que la mayoría sabe qué pasó al comienzo del año lectivo. Eso me distrajo por un tiempo, reprobé exámenes, me dejé de lado a mí misma y me dediqué a pensar en un único tópico. Después todo se calmó hasta que se extinguió. Celos, miedos. Y ahí paulatinamente, ambos hayamos el final en un encuentro de palabras un tanto bizarro y por un medio bastante inconveniente. Aunque quizás ahora que lo puedo pensar claramente, fue lo mejor. En ese tiempo descubrí, a su vez, que puedo ser algo que nunca creí llegar a ser para alguien. Y no me refiero a él. Fueron otros puntos a los que me refiero. Y lo afirmé con el tiempo y en otras situaciones. De todas maneras, sigo pensando que la gente está loca, o ciega, no lo sé. También en ese lapso de tiempo perdí amistades que luego recuperé, por suerte. Porque ahora puedo decir que realmente las extrañé y me equivoqué muy mal con ustedes. También gané grandes amistades que todavía siguen conmigo, que nunca me abandonaron y cada vez las siento más cercanas. Amistades que me costó mucho conseguir; una me odiaba y el otro siempre fue demasiado importante como para prestarle atención a una cualquiera como yo. Pero increíblemente logré romper con los prejuicios, con las diferencias, y ahora forman una parte muy importante de mi vida. Me encontré a su vez, como creo que todos los años, con dos personas a las que me encargué de insultar 18 hrs. diarias. Que sinceramente no sé por qué ocupan una parte en este texto, porque no lo merecen. Continuemos; conocí a unas pequeñas de lo más adorables, que espero conocer mucho más con el tiempo y espero que sigan confiando en mí como lo vienen haciendo hasta ahora. Que me inundan con sus locuras y su inocencia todos los días, y me recuerdan lo que alguna vez fui. Me distancié de otros, pero en definitiva, es lo más lógico, creo yo. Lo más saludable, a veces. Después, bueno, la muerte de mi abuelo fue algo que me tocó muchísimo, como podrán imaginar. Pero no me alteró en absoluto. Tengo en claro que esas cosas suceden, y lo tomé como algo natural, por más que fue una sorpresa para todos. Lo que me alteró, , fue que trajeran a mi abuela a vivir con nosotros. Los primeros meses, lo aguanté a la perfección. Es más, yo era la única que la trataba bien. Después empecé a despertarme con gritos los fines de semana, empecé a depender de ella todo el tiempo, dejé de salir cuando yo tenía ganas, empecé a salir cuando mi mamá no necesitaba que la cuidara, mi cabeza no paraba de dolerme, empecé a darme cuenta lo que realmente significaba que ella estuviera acá. Empecé a darme cuenta que no se iba a ir por mucho tiempo, que mi vida iba a seguir así por un largo rato. Y ese fue el exacto momento en el que reaccioné y exploté. Dejé de tratarla bien, dejé de tratar bien a todo el mundo, a mi familia, mejor dicho. Ahora ayudo poco y nada, aunque me duela en el alma ver a mi mamá dejando su vida de lado para poder dedicarla a mi abuela. Pero ese es un tema largo para explicar acá. Y bastante pesado, por cierto. Entonces prosigamos. En lo académico. Bueno, ese es otro tema aparte. Me llevé mi primera materia. Y lo digo como una madre diría "se le cayó su primer diente" porque es eso. Algo nuevo, que por ahora me aterra, porque todavía no la rendí. Pero en sí, en lo que al estudio se refiere, fue un año bastante mediocre. Como lo viene siendo la secundaria en general. La diferencia entre mi primer y segundo año, y mi tercer año fue que conseguí notas bastante altas en los exámenes, que no están expuestos en mi boletín de calificaciones por el simple hecho de que las conseguí para levantar notas anteriores, extremadamente bajas. Pero insisto, no sé si fueron las hormonas o qué cosa, pero este año fui una completa mediocre. Sin embargo, por más tragedia familiar, cambios de amistades, variaciones físicos o emocionales, recuerdos extremadamente alegres o recuerdos extremadamente nefastos, creo haber crecido un poco más. Madurado, por así decirlo. Por más que estoy completamente en desacuerdo con esa palabra. Digamos que en este 2008, mi mente acompañó mi crecimiento físico. Nada más y nada menos. Lo de madurar, lo dejamos para más tarde. Quizás. Por ahora quiero seguir viviendo como hasta ahora, feliz e inmadura, con mis preocupaciones tontas de adolescente. Y que esas personas que tanto me costó conseguir, sigan conmigo el año que viene, y el próximo también, y así sucesivamente.
.
.
.

3 comentarios:

Ro ♥ dijo...

sos hermosa. Preciosa. Una cosita re adorable. TE AMO MUCHISIMO Y LO SABES NO? es de verdad. Te amo.

x persona dijo...

escribis hermoso, en serio. sos una tierna y a mi me ENCANTÓ haberte conocido, fue una de las mejores cosas del año haberlas conocido a vos, a ro, a wari, a yanu y male. posta que si (: te amo camm ^^

I've never told a lie, and that makes me a liar.~ dijo...

sos la mejor ♥ te qiiero tanto qe no sabes Camm, en serioo. Te amo ♥