¿Qué puedo decir de vos? De hecho mentiría si dijera que ya te lo dije todo antes, porque nunca te lo dije. Y en momentos como este me hubiera gustado que lo sepas todo, pero sinceramente nunca me había puesto a pensar tanto en vos como ahora. "Es la ley de la vida" me dicen continuamente. Pero esa ley no me gusta, para nada. ¿Por qué será que las personas siempre se dan cuenta de lo mucho que tienen cuando ya lo perdieron? Todavía no tengo ese punto claro, pero ahora me doy realmente cuenta de lo mucho que me enseñaste con tu silencio. Persona de pocas palabras, si las hay. Pero una persona que daba hasta lo que no tenía por los demás, especialmente por su familia. Exactamente así, en silencio. Una persona humilde y luchadora, que tenía bien claro que nada le estaba asegurado, y que se abrió su camino lentamente, por más duro que le resultara. Una persona que demostraba su cariño a su manera, no con palabras, no con abrazos, simplemente acompañándote a cada paso, preparado para levantarte de cada tropiezo de la vida. Y recuerdo en lo personal muchos momentos con vos, que parecerán insignificantes, pero en este momento los extraño más que a nada. Todas esas mañanas en el quiosco de revistas, mirando la gente pasar, ayudándote con los diarios, cuando me contabas sobre esa gente que pasaba; esa que conocías como nadie lo hacía. Y yo me divertía. Y después, cuando cerrabas, volvíamos a tu casa, donde la abuela nos esperaba con algo rico para almorzar, y por lo general, yo volvía con una revista abajo del brazo. Porque era a la única a la que podían malcriar, y cumplieron muy bien su tarea. Siempre había algo esperándome ahí, ya sea un caramelo, moneditas, o una revista. Cosas mínimas que en ese entonces a mí me parecían gigantes, y lo eran, porque aunque fueran chiquitas, les costaba dármelas. Y me parece mentira que ya no voy a escuchar más tu voz en mi cumpleaños, ni cuando llame yo por el tuyo. Que no va a haber más cumpleaños, ni más Navidades, ni más Años Nuevos. Pero aunque me duela en el alma, te pido que dejes de luchar. Porque ya luchaste demasiado. Solo quiero que sepas que sos mi modelo a seguir y que te agradezco infinitamente todo lo que hiciste por nosotros. Y que siempre te voy a recordar con una sonrisa. Pero no me culpes si junto a ella, también derramo una lágrima de melancolía...
viernes, 12 de septiembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Wow, me sorprendió lo cálido que me resultó el texto. Expresar cosas asi no siempre son fáciles, dirigirte a alguien en específico que ya no está. Son cosas que te hubiese gustado decile personalmente, un "gracias" sincero, quizás. Pero fue un agradecimiento pendiente, ¡qué mejor que escribirlo! :)lo hiciste muy bien camm, me llegó muchísimo. Hay tantos gracias que uno tiene que decir...que no se haga tarde.
Te amo
y te busqué por msn , pero you are not online
y otra vez, te amo - ♥
Publicar un comentario